Instituciones como la Biblioteca Histórica, la Hemeroteca Municipal y el Museo de Historia de Madrid conservan importantes colecciones de documentos relacionados con los acontecimientos de 1808. De todos ellos se ha realizado un selección de ocho escritos, dos estampas y un plano de Madrid, que se han reproducido en calidad facsímil para formar una carpeta que se constituye en una eficaz herramienta para diseccionar y reconstruir el ambiente y los acontecimientos que vivieron los madrileños en aquellos días.