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Banda Sinfónica Municipal
Pablo Sorozábal // Director
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Descripción
Titulo:
Pablo Sorozábal // Director
Fecha:
ca. 1960
Lugar:
Madrid
Descripcion:
Lienzo enmarcado
65 x 51 cm.
Retrato de medio cuerpo con esmoquin.
Tipo:
Pintura
Signatura:
BSM-V0174

Comentario
Pablo Sorozábal (1897 - 1988) . Nacido en San Sebastián, estudió música en su ciudad natal gracias a la ayuda de la Sociedad de Amigos del País, que le posibilitó tomar lecciones con Alfredo Larrocha (violín) y con Manuel Cendoya (solfeo). Fue niño cantor del Orfeón Donostiarra y durante su infancia y juventud se ganó la vida tocando el violín por cafés y teatros. En 1914 ingresó en la Orquesta del Gran Casino de San Sebastián y en 1919 se trasladó a Madrid para ser violinista de la Orquesta Filarmónica de dicha ciudad, gracias al apoyo del director de orquesta Enrique Fernández Arbós.
Estudió luego en Leipzig con Stephan Krehl (contrapunto), Hans Sitt (violín) y Friedrich Koch (composición) debutando en Berlín como director de orquesta en 1923. En 1928 decidió volver a España y fijar su residencia en Madrid. Allí dirigiría la Banda Municipal entre 1936 y 1939 y la Orquesta Filarmónica de Madrid entre 1945 y 1952. Se adaptó rápidamente al formato musical de la Banda y su labor, a pesar del poco tiempo que estuvo al frente de ella, dejó gran huella, especialmente apreciable en el repertorio zarzuelístico. En 1937, el Ayuntamiento decide que la Banda Municipal realice una gira por la costa mediterránea con el fin de recaudar fondos para la compra de alimentos destinados al sitiado pueblo madrileño. Durante un año se celebraron 58 conciertos por toda la región valenciana y Cataluña. A su vuelta a Madrid y hasta el final de la contienda, los conciertos de la Banda Municipal tuvieron lugar mayoritariamente en los locales de ensayo para ser emitidos por radio. Finalizada la guerra, algunos componentes de la Banda tuvieron que enfrentarse a una junta depuradora, entre ellos el maestro Sorozábal que fue castigado a no ocupar cargos directivos por lo que deja la dirección a finales de 1939.

Como compositor, fue uno de los últimos grandes representantes de la zarzuela, en una época en la que el género empezaba a dar muestras inequívocas de agotamiento. Estrenó en Madrid, con gran éxito, la zarzuela Katiuska (1931), con libreto de Emilio González del Castillo y Manuel Martí, y alcanzó posteriormente otros éxitos en este género con obras como La tabernera del puerto, La del manojo de rosas (1934), La eterna canción (1945) y Black el payaso (1942). Compuso también para orquesta títulos como Variaciones sobre un tema popular vasco (1927) y Paso a cuatro (1956) y las óperas Adiós a la bohemia (1933), sobre textos de Pío Baroja, y Juan José.
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