Descripción
Titulo:
Gioachino Rossini
Fecha:
1991
Lugar:
Madrid
Descripcion:
C/ Clavel, 3
Distrito: Centro
Colocada en el año 1991
Editor: Ayuntamiento de Madrid
Distrito: Centro
Colocada en el año 1991
Editor: Ayuntamiento de Madrid
Tipo:
Placa conmemorativa
Signatura:
s/sig
Palabras Clave:
Comentario
Aquí estuvo durante la década de 1830 la fonda de Genieys, donde vivió el músico GIOACHINO ROSSINI, cuando compuso su STABAT MATER
Gioacchino Rossini (1792 - 1868), el llamado “Cisne de Pésaro”, era hijo de un músico y una cantante. Estudió en el Liceo Musicale de Bolonia. Su primer éxito lo consigue en 1912 en la Scala de Milán. Tres años más tarde asume la dirección artística del teatro de San Carlo en Nápoles, donde se casa con la madrileña Isabel Colbran, que trabaja con él como soprano. A partir de 1916 compuso óperas como “Tancredo”, “El Barbero de Sevilla”, “La italiana en Argel” y “Guillermo Tell”, que le llenaron de éxito y fortuna hasta 1832, que se retira de la composición de obras.
El compositor llegó a Madrid, en compañía de su amigo el Marqués de Las Marismas en 1831. Se alojó en La Fonda de Genieys, que estaba instada en el palacio Masserano, en este lugar de la calle del Clavel, esquina La Reina. La Fonda era considerada como una de las mejores de la Corte a pesar de que había en la ciudad muchas y muy variadas, ya que Madrid era un destino de gran atractivo para los viajeros románticos. También éste era un lugar preferido por Larra, visitado por Espronceda y donde García Gutiérrez leyó por primera vez el drama romántico “El Trovador”. En ella se escribió gran parte de su “Stabat Mater”, pero pudo terminarlo en este lugar, ya que lo interrumpió debido a su lumbalgia y a sus tendencias depresivas, hasta que, años más tarde, la concluyó y la estrenó en Bolonia, en 1842.
En esta visita, Rossini dirigió en el Teatro de la Cruz, que durante un tiempo se dedicó al género Lírico, su obra “El Barbero de Sevilla” en 1831, ante 1500 espectadores. Después de esta estancia vive entre Francia e Italia dedicado a pequeñas composiciones religiosas y a su delicado vivir.
Gioacchino Rossini (1792 - 1868), el llamado “Cisne de Pésaro”, era hijo de un músico y una cantante. Estudió en el Liceo Musicale de Bolonia. Su primer éxito lo consigue en 1912 en la Scala de Milán. Tres años más tarde asume la dirección artística del teatro de San Carlo en Nápoles, donde se casa con la madrileña Isabel Colbran, que trabaja con él como soprano. A partir de 1916 compuso óperas como “Tancredo”, “El Barbero de Sevilla”, “La italiana en Argel” y “Guillermo Tell”, que le llenaron de éxito y fortuna hasta 1832, que se retira de la composición de obras.
El compositor llegó a Madrid, en compañía de su amigo el Marqués de Las Marismas en 1831. Se alojó en La Fonda de Genieys, que estaba instada en el palacio Masserano, en este lugar de la calle del Clavel, esquina La Reina. La Fonda era considerada como una de las mejores de la Corte a pesar de que había en la ciudad muchas y muy variadas, ya que Madrid era un destino de gran atractivo para los viajeros románticos. También éste era un lugar preferido por Larra, visitado por Espronceda y donde García Gutiérrez leyó por primera vez el drama romántico “El Trovador”. En ella se escribió gran parte de su “Stabat Mater”, pero pudo terminarlo en este lugar, ya que lo interrumpió debido a su lumbalgia y a sus tendencias depresivas, hasta que, años más tarde, la concluyó y la estrenó en Bolonia, en 1842.
En esta visita, Rossini dirigió en el Teatro de la Cruz, que durante un tiempo se dedicó al género Lírico, su obra “El Barbero de Sevilla” en 1831, ante 1500 espectadores. Después de esta estancia vive entre Francia e Italia dedicado a pequeñas composiciones religiosas y a su delicado vivir.
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