Como muestra de la modernidad que poco a poco termina con los aires provincianos del Madrid del primer tercio del siglo XX, el reportero visita los recientemente inaugurados "Billares Callao". Se trata de un establecimiento perteneciente a la cadena Brubbiks de París, dotada de 32 mesas, incluidas algunas exclusivas para profesionales y de una sala aparte dotada de graderío para la celebración de competiciones. Un bar americano completa las instalaciones, sirviendo "sabrosísimos tónicos a los infatigables aficionados".