Claudio Claudiano era el poeta de la corte del emperador romano Honorio y Estilicón. Procedente de Alejandría, Claudiano llegó a Roma antes del 395, y realizó su entrada en la ciudad con un elogio a sus dos patrones, los jóvenes Probino y Olibrio, tras lo cual llegaría a ser poeta de la corte.
Está editado por Cristóbal Plantino (Saint Avertin, c. 1520 - Amberes, 1589) que fue un editor, impresor y librero flamenco (si bien Saint Avertin se encuentra en la actual Francia). Se hizo célebre por obtener de Felipe II los derechos de impresión en exclusiva de los textos religiosos, hecho que hizo florecer su imprenta.