La fotografía está tomada al final de la calle Embajadores cerca del Mercado de Frutas y Verduras. El lañador era un oficio callejero, se colocaba en algún lugar concurrido y las vecinas acudían con los cacharros de cocina agujereados para repararlos, cacerolas, barreños, sartenes, pucheros. Sus instrumentos de trabajo eran como vemos en esta imagen una lata con ascuas de carbón encendidas para mantener el soldador incandescente y con trocitos de estaño iban poniendo parches y remendando los cacharros.
El nombre de lañador viene de las lañas o grapas con las que tradicionalmente se reparaban los recipientes de cerámica o barro, luego por extensión se siguió aplicando a los que reparaban los utensilios de cocina de metal aunque también se les llamaba hojalatero o latero.