Entrevista en audio.
02:10min.
Procedente del proyecto Plantación de la Memoria. Imagina Madrid (Vicálvaro).
Entrevistado: Valentín González (Asociación Vicus Albus)
Entrevistador: Diego Sabanés. Sonidista: Gastón Horischnik
Vicálvaro se ganaba la vida con la venta de pan, la venta de materiales de construcción y con lavar la ropa de los ricos. Las mujeres traían la ropa hasta Vicálvaro, la lavaban y la devolvían limpia y planchada. Vicálvaro se distinguía por tener manantiales propios y lo que se llama "viajes de agua". La más importante era la fuente de Arriba o fuente de los Cinco Caños, situada en lo que es hoy el Camino viejo de Vicálvaro. En ese lavadero, en la época de la dictadura de Primo de Rivera, le pusieron un tejado y se mantuvo hasta el año 75, cuando fue derribado y enterrado. La otra fuente que también tenía lavadero, era la fuente de San Pedro, que estába cerca al cementerio, en la parte sur del pueblo. Al desenterrarla en los años 90, hemos encontrado una zona donde las mujeres depositaban las barras de jabón. Imagino que con el rigor del invierno, el lavadero más utilizado sería el que tenía tejado. Las otras actividades como la fabricación de pan y la extracción de materiales para la construcción eran realizadas por hombres. A la fecha de hoy, no se les ha reconocido ni a las mujeres lavanderas, ni a las aguadoras, su mérito con algún monumento o estatua en la zona donde estaban los lavaderos. Aquí había una mujer, que era "la Andrea", que con su borrica llenaba los cántaros y la repartía a las casas de los pudientes.