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Descripción
Titulo:
Fuente de Apolo
Fecha:
Entre 1 de Enero de 1707 y 31 de Diciembre de 1707
Lugar:
Madrid
Descripcion:
Pétreo .
Altura: 5,75 x Anchura: 2,00 x Fondo: 2,00 m.
Paseo del Prado
La fuente de Apolo o de las Cuatro Estaciones se constituye a partir de un gran pedestal circular y cuatro pilastras de carácter arquitectónico, junto a dos pilones circulares laterales, cada uno con un grupo de nueve surtidores. Destaca la figura de Apolo, el escudo de Madrid tallado y las cuatro figuras de las Cuatro Estaciones. Además en cada uno de los laterales aparecen las máscaras de Circe y Medusa, las cuales actúan como surtidores.
Altura: 5,75 x Anchura: 2,00 x Fondo: 2,00 m.
Paseo del Prado
La fuente de Apolo o de las Cuatro Estaciones se constituye a partir de un gran pedestal circular y cuatro pilastras de carácter arquitectónico, junto a dos pilones circulares laterales, cada uno con un grupo de nueve surtidores. Destaca la figura de Apolo, el escudo de Madrid tallado y las cuatro figuras de las Cuatro Estaciones. Además en cada uno de los laterales aparecen las máscaras de Circe y Medusa, las cuales actúan como surtidores.
Tipo:
Escultura
Signatura:
s/sig
Núm Inventario:
s/n
Palabras Clave:
Comentario
Ventura Rodríguez realizó el proyecto de la fuente de Apolo en 1777; el gran pilón central ya debía estar terminado en 1780 pues en él se había colocado una estatua provisional de Apolo que había realizado José Panuche con ayuda de los hermanos Roberto y Luis Michel. Ese mismo año Alfonso Bergaz ejecutó las máscaras de Circe y Medusa que servían de surtidores. La obra que remata la fuente, la escultura de Apolo definitiva, y las figuras de las Cuatro Estaciones fueron encargadas al escultor Manuel Álvarez en diciembre de 1781.
La obra, patrocinada por la Casa Real en época de Carlos III dentro del proyecto del Salón del Prado, no fue inaugurada hasta 1803, ya reinando Carlos IV. Situada a una cota inferior del paseo, en la reforma del Paseo del Prado de 1952 por Manuel Herrero Palacios se ajardinó su entorno para protegerla del público, se igualó la rasante y se dispuso una lonja para la contemplación de la fuente.
La obra, patrocinada por la Casa Real en época de Carlos III dentro del proyecto del Salón del Prado, no fue inaugurada hasta 1803, ya reinando Carlos IV. Situada a una cota inferior del paseo, en la reforma del Paseo del Prado de 1952 por Manuel Herrero Palacios se ajardinó su entorno para protegerla del público, se igualó la rasante y se dispuso una lonja para la contemplación de la fuente.
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