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Descripción
Titulo:
Manolo Tena
Fecha:
2017
Lugar:
Madrid
Descripcion:
Dirección: Plaza de Lavapiés, junto a la calle Argumosa.
Distrito: Centro.
colocada en el 30 de marzo de 2017
Editor: Ayuntamiento de Madrid
Distrito: Centro.
colocada en el 30 de marzo de 2017
Editor: Ayuntamiento de Madrid
Tipo:
Placa conmemorativa
Signatura:
s/sign.
Palabras Clave:
Comentario
En estos lugares se inspiró para sus canciones MANOLO TENA (1951 – 2016) “Lo difícil no es volar, sino aterrizar’.
José Manuel de Tena Tena, conocido por Manolo Tena, nació en Benquerencia de la Serena (Badajoz) y fue uno de los mayores representantes musicales del rock madrileño de la década de 1980.
En 1988 inició su carrera en solitario con el disco ‘Tan raro’ y continuó componiendo no sólo para sus propias interpretaciones, sino para otros cantantes como Miguel Ríos, Ana Belén, Luz Casal o Rosario Flores, entre otros.
Manolo Tena vino de muy abajo y trabajó en numerosos oficios como botones, aprendiz de imprenta, camarero, dibujante y vendedor. Más tarde intentó estudiar la carrera de Filología Inglesa, que abandonó, “porque sólo me daban bibliografía”, según comentó en una entrevista en 1994.
Como cantante publicó discos como “Sangre española” (1992), “Las mentiras del viento” (1995), “Juego para dos” (1997), “García Lorca, poeta en Nueva York” (1998)
― donde ponía música a dos poemas lorquianos ‘La aurora’ y ‘Son de negros’ ―, “Insólito” (2000), “Canciones nuevas” (2008) y “Casualidades” (2015).
Publicó también sus poemas y letras musicales en dos libros: “Canciones” (1993) y “Ludopoesía” (1999).
Tena, que había compuesto también para películas como “¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo?”, “Una chica entre un millón” o “París-Tombuctú”, entre otras, obtuvo diferentes premios y distinciones como el “Mejor Artista en la categoría de Rock” en 2001, el premio de la SGAE en reconocimiento a su trayectoria en 2008 o el “premio Latino de Oro al mejor compositor” en 2015.
Tuvo una vida llena de altibajos y de amigos, de noches interminables y creativas, que en alguna ocasión le causaron problemas. Entre 2008 y 2014 estuvo alejado de la actualidad musical por causa de su adición a las drogas, de las que se creyó rehabilitado hasta que en 2016, un 21 de diciembre, falleció de un cáncer de hígado.
Lavapiés fue su barrio, el lugar donde se inspiraba, porque, como escribió, “está hecho de la materia de la que se forjan los sueños proletarios burlados, y las esperanzas y desánimos verdinegros de los vendedores de cupones de la Once y la Lotería Nacional, desahuciados por la suerte, y de artesanos quijotescos y sancho-pancescos y de hippies y okupas que creen aún en la libertad (porque saben que existe).”
José Manuel de Tena Tena, conocido por Manolo Tena, nació en Benquerencia de la Serena (Badajoz) y fue uno de los mayores representantes musicales del rock madrileño de la década de 1980.
En 1988 inició su carrera en solitario con el disco ‘Tan raro’ y continuó componiendo no sólo para sus propias interpretaciones, sino para otros cantantes como Miguel Ríos, Ana Belén, Luz Casal o Rosario Flores, entre otros.
Manolo Tena vino de muy abajo y trabajó en numerosos oficios como botones, aprendiz de imprenta, camarero, dibujante y vendedor. Más tarde intentó estudiar la carrera de Filología Inglesa, que abandonó, “porque sólo me daban bibliografía”, según comentó en una entrevista en 1994.
Como cantante publicó discos como “Sangre española” (1992), “Las mentiras del viento” (1995), “Juego para dos” (1997), “García Lorca, poeta en Nueva York” (1998)
― donde ponía música a dos poemas lorquianos ‘La aurora’ y ‘Son de negros’ ―, “Insólito” (2000), “Canciones nuevas” (2008) y “Casualidades” (2015).
Publicó también sus poemas y letras musicales en dos libros: “Canciones” (1993) y “Ludopoesía” (1999).
Tena, que había compuesto también para películas como “¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo?”, “Una chica entre un millón” o “París-Tombuctú”, entre otras, obtuvo diferentes premios y distinciones como el “Mejor Artista en la categoría de Rock” en 2001, el premio de la SGAE en reconocimiento a su trayectoria en 2008 o el “premio Latino de Oro al mejor compositor” en 2015.
Tuvo una vida llena de altibajos y de amigos, de noches interminables y creativas, que en alguna ocasión le causaron problemas. Entre 2008 y 2014 estuvo alejado de la actualidad musical por causa de su adición a las drogas, de las que se creyó rehabilitado hasta que en 2016, un 21 de diciembre, falleció de un cáncer de hígado.
Lavapiés fue su barrio, el lugar donde se inspiraba, porque, como escribió, “está hecho de la materia de la que se forjan los sueños proletarios burlados, y las esperanzas y desánimos verdinegros de los vendedores de cupones de la Once y la Lotería Nacional, desahuciados por la suerte, y de artesanos quijotescos y sancho-pancescos y de hippies y okupas que creen aún en la libertad (porque saben que existe).”
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