La familia Camarón Jiménez al completo, los padres Bernardo y Carmen con sus cinco hijos, posan a la salida de misa delante de las dependencias parroquiales de la Iglesia del Purísimo Corazón de María.
En el ángulo formado por la casa parroquial y la Iglesia había un amplio atrio con cuatro árboles en el que los feligreses formaban grupos a la salida de misa, lo cerraba un muro bajo con reja en la esquina de la calle Embajadores con vuelta a la calle Cardenal Solís. Tanto la casa parroquial como el atrio desaparecieron al construir en su lugar el actual edificio de la calle Embajadores 81.