Ana Toscana Robles, familiar de la donante, acompañando a una enferma en el Hospital Provincial. En las manos tiene la imagen de un niño Jesús en la cuna- pesebre regalo que le hicieron a ella y hoy conserva la madre de la donante.
La Congregación de las hijas de la Caridad de San Vicente Paúl comenzaron a prestar sus servicios en este Hospital para la atención y cuidado de los enfermos desde el año 1822. La hermana Ana desempeñó la labor de ayudante de quirófano en la sala 36 y 36 bis trabajando junto a prestigiosos médicos como el cirujano Carlos González Bueno y el Dr. Carlos Jiménez Díaz.