La parroquia y la casa del párroco, Don Pablo Valdericeda. Frente a Don Pablo vivía un matrimonio con muchos hijos. ?La Mariquilla? salía a tender la ropa todos los días a la misma hora. Don Pablo la saludaba y sabía que era el momento de merendar. Al derrumbar esas casas, la de ?Mariquilla? y muchas otras familias, fueron trasladadas a Moratalaz.