Descripción
Titulo:
Cuerpo de San Isidro en la catedral de Madrid
Fecha:
1922
Lugar:
Madrid
Descripcion:
"5. Catedral de Madrid. / Cuerpo de San Isidro. // Grafos. Madrid"
Cartulina blanco y negro
14 x 9 cm
Cartulina blanco y negro
14 x 9 cm
Tipo:
Tarjetas postales
Núm Inventario:
Inv. 1991/1/63
Palabras Clave:
Comentario
San Isidro murió en el año 1172 y su cuerpo incorrupto se encuentra actualmente en la Real Colegiata de San Isidro, en la calle Toledo. El cuerpo, al tratarse de una preciada reliquia ha pasado por diversas visicitudes que incluyen disputas por su custodia, traslados, amputaciones, mordiscos, salvaciones milagrosas, etc.
Esta extraña historia comienza, según la leyenda, con el intento infructuoso de la esposa de Enrique II de amputarle el brazo derecho para llevárselo como reliquia. Años después, una dama de honor de Isabel la Católica arrancó de un mordisco el dedo gordo del pie del santo mientras se los besaba, pero fue descubierta y obligada a devolverlo. El dedo fue colocado en una bolsita colgada del cuello de San Isidro, aunque ahora está desaparecido.
Un diente del santo fue utilizado por Carlos II como amuleto y lo mantuvo bajo su almohada durante muchos años. Más adelante, se cuenta que incluso fue introducido en la cama de Carlos III para sanarle de una enfermedad, aunque probablemente esto solo sea una leyenda. Para terminar, durante la Guerra Civil la antigua Catedral de San Isidro fue incendiada, pero el cuerpo del santo pudo conservarse al esconderlo un obispo en un muro de la Catedral.
En ocasiones especiales se procede a la apertura del sarcófago alberga el cuerpo del santo para ser expuesto a la vista de los fieles. Así ocurrió en 1922, en el tercer centenario de su canonización (fecha de la imagen), en 1969 a los 350 años de su beatificación, en 1972 en el octavo centenario de su muerte, en 1982 en el noveno centenario de su nacimiento y en 1985 al cumplirse el priemr centenario de la diócesis de Madrid-Alcalá. La próxima aprertura del sepulcro está prevista para 2022.
Esta extraña historia comienza, según la leyenda, con el intento infructuoso de la esposa de Enrique II de amputarle el brazo derecho para llevárselo como reliquia. Años después, una dama de honor de Isabel la Católica arrancó de un mordisco el dedo gordo del pie del santo mientras se los besaba, pero fue descubierta y obligada a devolverlo. El dedo fue colocado en una bolsita colgada del cuello de San Isidro, aunque ahora está desaparecido.
Un diente del santo fue utilizado por Carlos II como amuleto y lo mantuvo bajo su almohada durante muchos años. Más adelante, se cuenta que incluso fue introducido en la cama de Carlos III para sanarle de una enfermedad, aunque probablemente esto solo sea una leyenda. Para terminar, durante la Guerra Civil la antigua Catedral de San Isidro fue incendiada, pero el cuerpo del santo pudo conservarse al esconderlo un obispo en un muro de la Catedral.
En ocasiones especiales se procede a la apertura del sarcófago alberga el cuerpo del santo para ser expuesto a la vista de los fieles. Así ocurrió en 1922, en el tercer centenario de su canonización (fecha de la imagen), en 1969 a los 350 años de su beatificación, en 1972 en el octavo centenario de su muerte, en 1982 en el noveno centenario de su nacimiento y en 1985 al cumplirse el priemr centenario de la diócesis de Madrid-Alcalá. La próxima aprertura del sepulcro está prevista para 2022.
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