La imagen refleja el estado de la Plaza de Cibeles en 1871, cuando la fuente de la diosa se encontraba en un extremo de la misma. También vemos a la derecha el Palacio de Buenavista sin el cubrimiento actual de sus frondosos jardines, y a mano izquierda el palacio de los Alcañices, que se encontraba en el solar que más tarde ocuparía el Banco de España.