Descripción
Titulo:
Emilio Carrere
Fecha:
1991
Lugar:
Madrid
Descripcion:
C/ Princesa, 49
Distrito: Moncloa-Aravaca
Colocada en el año 1991
Editor: Ayuntamiento de Madrid
Distrito: Moncloa-Aravaca
Colocada en el año 1991
Editor: Ayuntamiento de Madrid
Tipo:
Placa conmemorativa
Signatura:
s/sig
Palabras Clave:
Comentario
En esta casa vivió el escritor y poeta EMILIO CARRERE que dedicó a Madrid gran parte de su obra (1881-1947)
La capa, la pipa y el sombrero, su silueta melancólica por las calles de Madrid : “Bohemia del año diez: chambergos, pipas, /melenas y pergeños arbitrarios; / en honor de Rubén se quemaba un incienso / de exaltación y ensueño en todos los cenáculos…”
Nació el 18 de diciembre de 1881 en una de las calles más literarias del Universo, en la del León. Vino al mundo en el nº 4 con la tragedia de la muerte de su madre en el parto. Estudió en la Facultad de Filosofía y Letras y en la Politécnica, colocándose en el Tribunal de Cuentas. Creó un buen hogar con Milagros Sáez de Miera y una dulce familia.
Su otra vida fueron los cafés madrileños: el del Prado, el Nuevo Levante, el de Platerías, el de las Beatas, el de San Millán, el Comercial… en ellos estaba Carrere de espectador del teatro de la vida, y frente al cafetito posaban los que irían siendo sus futuros personajes, llenos de humanidad. Sus primeros libros son de versos: El caballero de la Muerte, Nocturnos de Otoño, Del Amor del Dolor y del Misterio, Dicterio sentimental, La copa de Verlain… Tuvo éxitos espectaculares con La novela Corta. La primera fue Bienaventurados los Mansos el 29 de abril de 1916. El gran número de ellas da lugar a sus volúmenes: Elvira la espiritual, La Tristeza del Burdel, Los ojos de la diablesa… donde en situaciones criticas de la pobre gente carente de todo, él les daba ternura, consuelo, futuro…
Esta casa fue uno de los distintos domicilios que tuvo el poeta en su Madrid, en el Madrid de los Austrias y en Argüelles. En la guerra del 36 vivía en Rosales, que era línea del frente. Huyendo de ella se refugió en el Sanatorio Psiquiátrico del Dr. León. Tras ella trabajó para el diario Madrid con el artículo diario Aquí Madrid. Su colección de más de 2.000 artículos era devorada por los lectores. Carrere consigue ser el más leído del periódico, seguramente porque Carrere es Madrid y viceversa. Su mundo es el de nuestra ciudad, a través de ella alabó a la vida, amó a Dios, comprendió a los triste… hasta que le llegó la muerte en La Casa de las Flores el 29 de abril de 1947.
La capa, la pipa y el sombrero, su silueta melancólica por las calles de Madrid : “Bohemia del año diez: chambergos, pipas, /melenas y pergeños arbitrarios; / en honor de Rubén se quemaba un incienso / de exaltación y ensueño en todos los cenáculos…”
Nació el 18 de diciembre de 1881 en una de las calles más literarias del Universo, en la del León. Vino al mundo en el nº 4 con la tragedia de la muerte de su madre en el parto. Estudió en la Facultad de Filosofía y Letras y en la Politécnica, colocándose en el Tribunal de Cuentas. Creó un buen hogar con Milagros Sáez de Miera y una dulce familia.
Su otra vida fueron los cafés madrileños: el del Prado, el Nuevo Levante, el de Platerías, el de las Beatas, el de San Millán, el Comercial… en ellos estaba Carrere de espectador del teatro de la vida, y frente al cafetito posaban los que irían siendo sus futuros personajes, llenos de humanidad. Sus primeros libros son de versos: El caballero de la Muerte, Nocturnos de Otoño, Del Amor del Dolor y del Misterio, Dicterio sentimental, La copa de Verlain… Tuvo éxitos espectaculares con La novela Corta. La primera fue Bienaventurados los Mansos el 29 de abril de 1916. El gran número de ellas da lugar a sus volúmenes: Elvira la espiritual, La Tristeza del Burdel, Los ojos de la diablesa… donde en situaciones criticas de la pobre gente carente de todo, él les daba ternura, consuelo, futuro…
Esta casa fue uno de los distintos domicilios que tuvo el poeta en su Madrid, en el Madrid de los Austrias y en Argüelles. En la guerra del 36 vivía en Rosales, que era línea del frente. Huyendo de ella se refugió en el Sanatorio Psiquiátrico del Dr. León. Tras ella trabajó para el diario Madrid con el artículo diario Aquí Madrid. Su colección de más de 2.000 artículos era devorada por los lectores. Carrere consigue ser el más leído del periódico, seguramente porque Carrere es Madrid y viceversa. Su mundo es el de nuestra ciudad, a través de ella alabó a la vida, amó a Dios, comprendió a los triste… hasta que le llegó la muerte en La Casa de las Flores el 29 de abril de 1947.
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