Calle Marqués de Duero, 7
El patio de acceso al palacio, antiguo paso de carruajes, desde el que se contempla la impresionante galeria superior del edificio, realizada en madera combinada con cristal y hierro forjado.
Dentro del edificio destaca la biblioteca de estilo racionalista neogótico y la riqueza de los fondos que en ella se conservan.
Palacio de carácter urbano que sigue las alineaciones de las calles abiertas por el Ensanche sobre los solares del antiguo pósito. Fue edificado en 1876 por Segundo de Lema dentro del movimiento arquitectónico que se ha denominado racionalismo neogótico, acorde a las líneas marcadas por Viollet-le-Duc, en el que los materiales se muestran en su aspecto natural señalando su finalidad constructiva. En 1876 el mismo J. Segundo de Lema construye en la calle Salustiano Olózaga, 6 una casa de viviendas de alquiler que complementa la edificación inicial, que, a partir de 1900, sufre una serie de reformas interiores, de apertura de huecos y de cubrición de patios a la altura del piso bajo, realizadas por Luis de Landecho, arquitecto que en 1917 -ya construida en el mismo estilo su casa de Alonso Martínez con vuelta a Sagasta para la señora viuda de Zabálburu- levanta un pabellón de nueva planta en la calle del Marqués de Duero con un salón de fumadores, invernadero y terraza, elevando un nuevo piso en la zona de vivienda que da a dicha calle sólo dos años después.
