Aquí vivió de 1940 a 1983 el científico y marino JOSÉ MARÍA OTERO DE NAVASCÚES, Marqués de Hermosilla, gran impulsor de la investigación en España.
El marqués de Hermosilla, José María Otero de Navascués, nació madrileño el 16 de marzo de 1907 en el nº 3 de la calle Ruiz de Alarcón. Ingeniero de Armas Navales, en 1927 amplió sus estudios en Zurich y Berlín. En los años cuarenta, fruto de sus investigaciones en óptica explicó científicamente el fenómeno de “la Miopía Nocturna”. La aportación de este avance le convierte en miembro de la Academia de las Ciencias a la edad de 37 años. Trabajó también en metrología y física nuclear.
En esta emblemática casa, desde cuya terraza se extiende El Parque de El Retiro como un mar de naturaleza y de arte, vivió 43 años. Su ático del séptimo piso, con los remates arquitectónicos que la definen, debe de ser uno de los miradores más singulares de Madrid. A esta casa vino a vivir cuando se casó con Mª Teresa Domínguez. Aquí tuvo su despacho y recibía en él a eminentes científicos de todo el mundo. En él trabajó y en él tuvo a sus catorce hijos.
Su principal objetivo profesional fue el de mejorar el nivel de la educación científica en España, promoviendo organismos como el Centro de Investigación de la Armada, el Instituto de Óptica Daza Valdés del CSIC, la Junta de Energía Nuclear. Fue presidente del Buró Internacional de Pesas y Medidas y Presidente consultivo de la redefinición de la medida “el metro “.
Presidió la XV Asamblea Mundial del Organismo Internacional de la Energía Atómica de Viena.
