Este edificio fue sede de 1917 a 1936 de LA RESIDENCIA DE SEÑORITAS dirigida por María de Maeztu que trabajó por elevar la formación de la mujer en España.
La Junta para la Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas supuso para el panorama universitario, cultural y científico español una auténtica revolución en un tiempo en el que España trataba de ponerse al día en diversos campos del saber, y equipararse a nuestros vecinos europeos. Fruto de estas exigencias educativas, nació la Residencia de Estudiantes, y más tarde, en octubre de 1917, su homónima femenina: la Residencia de Señoritas, nacida formalmente tras la propuesta de María de Maeztu a la Junta de la Institución, ya que de hecho venía funcionando incipientemente desde 1915 el llamado Grupo de Señoritas.
Con base en los principios pedagógicos de la Institución Libre de Enseñanza, fundada por Giner de los Ríos, la Residencia de Señoritas nació como un lugar acogedor con ambiente de estudio y compañerismo agradable para las pocas jóvenes que por su situación social o económica privilegiada podían acceder a estudios superiores en aquel momento y se trasladaban a Madrid para estudiar en la Universidad Central.
La Residencia estuvo dirigida, desde su creación hasta su desaparición al comenzar la Guerra Civil en 1936, por María de Maeztu, una mujer informada de últimas tendencias educativas que se estaban produciendo en Europa en ese momento. María era también una activa feminista, afiliada a la Asociación de Mujeres Españolas, fue una de las pioneras en la lucha por la igualdad de hombres y mujeres en la sociedad y reivindicó el derecho de las españolas a estudiar y desarrollar plenamente sus capacidades intelectuales en un tiempo poco propicio para ello.
