C/ San Bernabé, 11
Destaca la parte concava de la fachada principal, de gran barroquismo compositivo.
En el interior destaca la escalera que parte del vestíbulo y su decoración, así como los patios interiores, que distribuyen el edificio en planta. Destaca también la capilla interior.
Signatura
s/n
s/sig
Comentario
Terminada la capilla del Cristo de los Dolores en el convento de San Francisco, la Venerable Orden Tercera emprendió la construcción de un hospital con destino a los hermanos enfermos. El hospital está compuesto en torno a un patio de forma cuadrada y comprende dos plantas y un jardín en la parte posterior. La planta alta tiene una galería con pilares de granito, que originalmente estuvo abierta y hoy está cubierta con cristaleras. Posee una magnifica escalera de doble rampa con bóvedas decoradas por Teodoro Ardemans y Tomás García, realizadas en 1683.
El conjunto se completa con la iglesia, de planta de cruz latina y una sola nave dividida en tramos, decorada interiormente con entablamento y cornisa volada. Las ventanas termales se rematan con la típica bóveda de cañón con lunetos, habitual en el barroco madrileño. El diseño de la fachada tiene gran movimiento, con influencia de Borromini, poco común en la arquitectura madrileña. El juego de líneas cóncavas, a modo de contrafuertes, comprende las dos plantas y se remata con frontón curvo muy moldurado, siguiendo la misma línea cóncava.