Pueblo honrado y generoso de la capital de España: El Consejo os habla, y antes de dirigiros su palabra os pregunta: ¿Seriais capaces, en las circustancias críticas en que se halla la Nación, de aprovecharos de su desgracia para perturbar la tranquilidad ... Ciudadanos honrados, hombres buenos, y verdaderos patricios, armaos contra la iniquidad y el desorden de los que intentan alzarse con vuestras haciendas ... vivid seguros de que el Consejo y todas las justicias de esta Corte os protegerán ...