En este lugar estuvo de 1800 a 1950 en Café Pombo.
Rafael Flórez, espíritu activo sobre las cenizas del Pombo lo define como “Cenáculo de Prerromanticismo y del Romanticismo en el que fundara Ramón Gómez de la Serna su célebre tertulia”.
Pombo estaba muy céntrico, pero también su ubicación le permitía ser algo íntimo, sobre todo por su entrada por el callejón de San Ricardo.
Tenía sus lámparas de gas amarillento, sus espejos en unos salones con bóveda en los bajos de un edificio normal y corriente. Hoy en día hay un nuevo inmueble con dependencias de la Comunidad de Madrid.
Ramón dice que Goya iba al Pombo a tomarse su conocimiento de Madrid. Entonces era una botillería fundada por un santanderino de este apellido. La botillería era un lugar goloso de licores y sorbetes, muy recomendables para las petimetras en horas decentes a finales del siglo XVIII.
El “venazo” romántico se complementó en la certidumbre de que los sofás rinconeros de Pombo dieron intimidad a Espronceda con Teresa, a Larra con Dolores, a Bécquer con Casta… y a mil miradas amantes.
La tertulia fue la plaza pública del Café de Pombo, la universidad con un solo catedrático, que bajo el manto de su benignidad acogió a sus contertulios, los jaleó, los estimuló y dejó que se leyeran sus nuevas cuartillas o sus increíbles ideas.
Pombo pasó a la historia de la literatura por la tertulia de Ramón los sábados por la noche llamada “La santa Cripta del Pombo” donde dicen, quizás irreverentemente que Ramón oficiaba, homenajeaba y vivía. Lo que allí pasó y pasaba nos lo dejó en su libro POMBO: Surrealismo, modernismo, greguería y un estilo depurado de ser “Madrid “.
El cuadro de Gutiérrez Solana de La Tertulia de Pombo fue colgado en el local la noche del 17 de diciembre de 1920 y hoy forma parte de los fondos del Museo Nacional de Arte Reina Sofía.
“Picasso apareció un día por el Pombo...estuvo alegre entre los suyos, sonriendo como español que después de las victorias fuera, otra vez en España, sacase su sonrisa española, chiquitina, perdida de un hombre que no ha estado en ninguna parte ni va a ninguna parte, sino que está .”