Doble imagen es una obra pintada en Estados Unidos que, por cronología, se sitúa en la bisagra o en el momento de transición de su etapa conocida bajo la denominación de “fosforescencia”, iniciada en 1970 a base de formas figurativas como cerillas, sueltas o agrupadas en cajas, y la llamada etapa neoabstracta que se inicia en 1975, momento en el que Guerrero regresa a la no figuración.
En ese lapso de tiempo es donde podemos encuadrar esta obra, en la que se aprecia ya un estilo caracterizado por cierto enfoque constructivista, la renuncia expresa a una gestualidad visible en la aplicación del color, la falta de texturización que había caracterizado la fase anterior y, sobre todo, la búsqueda de una planitud y visualidad más inmaterial, notas de las que participa esta obra dentro ya de una idea de campo cromático en el que todavía no faltan referencias a ciertos elementos figurativos como arcos u ovalos y otras formas más concretas como las líneas que ordenan el espacio en el ámbito de la composición, que aquí consiguen sugerir ciertas sensaciones especulares.
Esa transformación o evolución hacia una pintura de mayor inmaterialidad por así decir, se fue fraguando en obras como esta que aquí se expone, próxima a otras como Enlace (1975) o Convergencia (1976) en las que era muy poco reconocible ya el pretexto figurativo. A juicio de algunos historiadores y críticos, “lo importante eran las masas cromáticas y evidenciar la relación entre las zonas de color, vagamente geométricas, así como tratar el contenido visual de las obras como si fuera algo monumental”, evidenciando una tensión arquitectónica que el propio Guerrero explicó como “trazas verticales o tensiones horizontales entrecruzando diagonales” en función de ciertas formas que él había visto de “columnas, postes, vallas, montones de madera junto a los muelles”.
Doble imagen podría verse también como el reflejo de un motivo en una alberca. Hay otra obra con este mismo título Doble imagen II (1975) con prácticamente los mismos elementos compositivos pero con la línea roja de unión en diagonal, en consonancia con el orden, la mesura, el rigor, la intensidad, la falta de énfasis y la naturalidad que siempre ha caracterizado a su pintura. MAC/EAL