Imprenta Real
Firmada por M. O. y dedicada a Floridablanca, el Discurso ha sido durante mucho tiempo obra anónima, atribuida a las más variadas autorías, hoy en día se considera su autor José de Espinosa y Brun. Bajo el subterfugio de una autoría femenina, se trataba de un denodado alegato ilustrado en favor de la austeridad de las señoras a quienes se pretendió imponer un traje nacional, una especie de uniforme con pocas variantes, como medida para atajar el lujo excesivo y los dispendios en vestuario.