Se puede leer en la publicación en la que se inserta la imagen: "En Antón Martín, a pesar de la angostura de la plaza, se ha conseguido también construir un amplio vestíbulo al que se baja por una escalinata de 3 metros de anchura colocada en el centro de la plaza, atravesando una rotonda decorada con nervaduras y dovelados de cerámica blanca esmaltada y mosicos de reflejos y mayólicas cobrizas. El vestíbulo es de planta rectangular y a sus costados y a través de robustas arcadas se ven las escaleras que conducen a los andenes; en su decoración, además de los azulejos blancos biselados, se han empleado finísimas cerámicas de Toledo, de color gris con irisaciones".