Calle del Clavel. En el año 1835 pasó a denominarse travesía de Altamira, por estar frente al palacio del mismo nombre. Esta calle desapareció con las obras de la Gran Vía.
La solicitud de permiso de obra contiene también la valoración del arquitecto Ventura Rodríguez, en su calidad de supervisor del Consejo de Castilla, que informa a la Contaduría General de Arbitrios y Propios del Reino de las obras que se van a realizar para que le sea otorgada la licencia de obra solicitada.